Repasando los coches que ésta firma italiana tiene en su gama, nos dimos cuenta de que muchos de ellos tenían nombres bastante curiosos. Pronunciados sin llevar el nombre de la marca delante, nos evoca todo menos un automóvil.
Empecemos pues, por el que yo creo que es un acertado
homenaje a Marco Polo. Que mejor nombre para un coche que el de un vocacional viajero.
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| Lamborghini Marco Polo |
Jarama, Jalpa, Urraco, Veneno…éstos son otros de los nombres con los que se han bautizado a diferentes modelos de Lamborghini. Nombres con una estética feísta que contrastan con la mítica belleza de líneas de la marca.
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| Lamborghini Jarama |
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| Lamborghini Jalpa |
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Lamborghini Urraco
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Lamborghini Veneno
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Pero las dos denominaciones estrella son el Lamborghini Reventón, que no invita a comprar el automóvil a no ser que te guste vivir al límite, y el Lamborghini Egoísta, un claro guiño al dicho "lo tuyo es mío y lo mío es mío".
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| Lamborghini Reventón |
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| Lamborghini Egoista |
Pero lo más llamativo de todo es que observando algunos de los modelos de la marca, parece que estás consultando un diccionario taurino. Términos tan propios de dicho arte como Miura, Espada o Estoque son utilizados como nombre para éstos coches. E incluso van más allá, Minotauro, como si de un toro más especial y sofisticado se tratara o Islero, que fue ni más ni menos que el toro que mató a Manolete.
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Lamborghini Miura
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| Lamborghini Espada |
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| Lamborghini Estoque |
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| Lamborghini Minotauro |
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| Lamborghini Islero |
Repasados ya casi en su totalidad todos los modelos de Lamborghini, queremos terminar con dos nombres que no pasarán desapercibidos para nadie:
Diablo y Murciélago.
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| Lamborghini Diablo |
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| Lamborghini Murcielago |
Pero si alguien tiene alguna duda, puede conducir el
Pregunta, otro Lamborghini con nombre de todo, menos de coche.
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| Lamborghini Pregunta |
